Que bonito, la Conferencia Episcopal excomulgará a todos los diputados, senadores… que apoyen la ley del aborto. Es alucinante, mientras el PP mandó en este país, y con una ley del aborto que no se cuestionó desde sus filas la jerarquía católica no “amenazó” con algo parecido. Y ya había aborto y si es cierto que la nueva ley es menos restrictiva, el fondo de la negativa de la Iglesia católica es el aborto, no la ampliación de la ley. ¿Por qué no excomulgaron a los populares? Esos mismos populares que, a título individual, acudieron a la beatificación de Monseñor Escriba de Balaguer.
No solo eso, cuando Aznar firmó junto con otros mandatarios mundiales (algunos ultraconservadores y muy “religiosos”) el enviar tropas a Irak para iniciar una guerra, no amparada por la ONU (señores, no lo comparéis a Afganistán, que cuenta con la aprobación de Naciones Unidas) no oímos que nadie excomulgara a los componentes del gobierno por ir a matar a iraquíes, muchos de ellos simples civiles que no habían hecho nada (si, como la iglesia pinta a los nonatos, seres que no han hecho daño y que según ellos ya son personas)
Y me pregunto, ¿está bien matar “infieles” inocentes? ¿La iglesia no excomulgará si en la ley del aborto se acota que solo podrán abortar musulmanes?
Me da igual lo que opine la Jerarquía Católica (que no los católicos de base) ya me han mostrado en innumerables ocasiones su doble, triple… moral. O es que no es doble moral permitir la pederastia de algunos de sus religiosos, o las violaciones documentadas en África de curas a monjas engañándolas con pseudoteorías de que era mejor así para no coger el Sida.
Y mi conclusión es, ¿tenemos que mantener económicamente a aquel que nos pone trabas y nos condiciona nuestra libertad? ¿Es lícito aceptar injerencias de aquél a quién mantenemos? NO, por tanto desde aquí pido el apoyo a los ciudadanos libres de nuestro país para solicitar a nuestro Gobierno que sea consecuente y recuerde que somos un país aconfesional y retire las subvenciones y los acuerdos con la Santa Sede.
Próceres de la Iglesia, el mundo está vivo, solo podéis aferraros a la fe, no podéis demostrar la existencia de Dios ni del cielo, ni del infierno, y aun así habéis puesto en duda, que la tierra es plana, que no es el centro del Universo, que exista la evolución de las especies. Hay un libre pensamiento (no la razón única), dejadnos ser personas. Vuestra fe os lleva a pensar que sois los que tenéis la verdad absoluta, pero hay más personas en el mundo que no piensan como vosotros que los que si. Continuad de esa manera, y el descenso de vocaciones a sacerdote y de católicos en el mundo se hará cada vez más evidente. No lo achaquéis al individualismo de la sociedad, es más un individualismo en el pensamiento, en no creer ciegamente en los postulados de quien debe dar ejemplo y no lo hace. ¿Donde está el espíritu de sacrificio y voto de pobreza en el Vaticano y en arzobispados…? Apoyando a regímenes totalitarios, a asesinos de masas al alienamiento de los pueblos.